lunes, 25 de octubre de 2010

Sobre Uribe, los Nule y el PGN

El caso de los Nule donde están embolatados más de quinientos mil millones de pesos, puede ser una bicoca en comparación con los compromisos que el Gobierno de Uribe firmó para proyectos de infraestructura con cargo a vigencias futuras.

Teniendo en cuenta la naturaleza anual del Presupuesto General de la Nación (PGN), las vigencias futuras aparecieron como herramienta para permitir el desarrollo de proyectos de inversión especialmente en infraestructura, necesarios para el desarrollo del país, y recientemente, también como caja mayor de los corruptos.

Durante los dos gobiernos de Uribe se despertó un gran interés por el uso de este instrumento, supongo que con el fin de solucionar los problemas de infraestructura del país, que son muchos. De acuerdo con el documento REGLA FISCAL PARA COLOMBIA preparado por un comité técnico interinstitucional en el que participaron miembros del Banco de la República, el Ministerio de Hacienda y Crédito Público y el Departamento Nacional de Planeación (Ver documento), hay aproximadamente 1,4 billones de pesos en vigencias futuras destinados sólo a contratos de concesión, sí, contratos como los del grupo Nule. Pero, ¿hay que preocuparse?, ustedes juzguen: Los contratos de concesión son apenas una muestra de lo que se puede venir pierna arriba, estos contratos representan apenas el 6% del total de vigencias futuras destinadas a financiar proyectos de inversión autorizados durante las administraciones Uribe, es decir, la feria de contratos en los últimos años ha sido grande, muy grande y las contingencias que el Estado puede enfrentar en el futuro pueden ser inmensas.

Nadie niega que todos los proyectos planteados sean importantes para sacar a Colombia del atraso en infraestructura en que se encuentra, pero dados los titulares recientes, en un país donde las firmas constructoras tienen más abogados que ingenieros, da mucho temor de que lo sucedido con los Nule y sus contratos de concesión en Bogotá sea sólo una muestra de lo que está pasando con el resto de contratos en el resto del país. De ser así el total de los recursos comprometidos por la administración Uribe para proyectos de infraestructura se eleva 23 billones de pesos, una bicoca equivalente al 36% del total del Presupuesto General de la Nación aprobado para el 2011, o a que cada uno de los 17 millones y medio de afortunados colombianos que se encuentran ocupados hoy según el DANE se bajara del bus con un millón trescientos mil pesos (1, 316,719) pasa salir de esas culebritas.

Sólo queda rezar entonces para que el resto de recursos destinados a obras de infraestructura financiados con vigencias futuras se encuentren en mejores manos que las de los concesionarios de Bogotá. Habrá que encomendarse a San Uriel.

viernes, 22 de octubre de 2010

Productividad del Agro

Para la mayoría de campesinos en Colombia todo ha jugado en su contra. En Colombia campesino es sinónimo de pobre, victima, desplazado, bueno con excepción de los "campesinos" beneficiarios del programa AIS y uno que otro ganadero. Sin embargo, asociar a los verdaderos campesinos con desarrollo productivo, progreso, y trabajo duro y honrado, es una realidad evidente en muchos otros países. Mientras que en Colombia el ingreso percapita ha crecido más de 4% en la última década, el sector agrícola solamente lo hizo a la mitad (algo mas del 2%). Caso opuesto al de otros países del continente donde el crecimiento agrícola durante los últimos 10 años ha sido superior al crecimiento económico entre ellos Brasil, Chile, Méjico, Paraguay, y Estados Unidos.

A principios de los años noventa, entre 1993 y 1994, el sector agrícola sufrió una fuerte contracción de su productividad cercana a una cuarta parte en términos reales[1], y posteriormente se observaron tasas negativas de crecimiento durante la década, las cuales llevaron al sector hasta niveles de generación de valor agregado equivalentes a las de mediados de los años 80, es decir, el sector retrocedió casi 10 años. Luego de un período de lenta recuperación, en el 2008 el valor agregado por trabajador fue de tres mil doscientos dólares (US$3200 en dólares del 2000), apenas el mismo nivel observado en el año 1992, es decir, el rezago con respecto a niveles anteriores se ha ampliado a casi 20 años. (Ver Gráfica - Datos del Banco Mundial)

Sólo para ver la inmensa diferencia entre lo que estamos haciendo y el potencial de producción la tierra se puede considerar el siguiente ejemplo: En el 2007 los Estados Unidos mostró una productividad percapita de 45 mil dólares en el sector, Argentina de 12 mil, Venezuela de 8 mil, Chile de 6 mil, Panamá de 4 mil, mientras en Colombia sólo fue de 3 mil. Si bien el desarrollo del sector no es condición necesaria para lograr un mayor desarrollo económico en todos los países, en Colombia puede desempeñar un papel primordial si es orientado apropiadamente, las políticas de desarrollo productivo y de encadenamientos con actividades industriales que generen mayor valor agregado son claves en el aumento del empleo y los ingresos de los trabajadores. Bienvenido sea el programa de restitución de tierras planteado por el nuevo gobierno, esperemos que la historia no juegue en su contra (Ver columna de Salomón Kalmanovitz)

Fuente: World Development Indicators


[1] Tomando como medida de productividad el valor agregado por trabajador, que mide la producción del sector restando el valor de los insumos usados en la producción.

jueves, 14 de octubre de 2010

Chimamanda Adichie: The danger of a single story

Chimamanda Ngozi Adichie, is a writer, or as she describes her self a 'story teller', who gives us a beautiful perspective about the role of knowledge in building a better society. This is excellent story. I hope you enjoy it.

miércoles, 13 de octubre de 2010

Costa Rica y Colombia Tan Cerca y Tan Lejos

Costa Rica es un país que hoy tiene un décimo de la población de Colombia (alrededor de 4.5 millones de habitantes) y una extensión territorial veinte veces menor que la nuestra. Este país centroamericano tiene la peculiaridad de ser uno de los miembros del selecto club de países que sabiamente han escogido no tener ejercito (Ver países), es decir, le han dicho no a la guerra para invertir todos sus recursos en lo que es realmente importante, educación, salud, infraestructura, etc.
De acuerdo con datos del Banco Mundial, apenas hace 20 años, en 1990, Costa Rica y Colombia tenían la misma proporción de su población (18%) debajo del umbral de pobreza de dos dólares al día. En el caso de Costa Rica, esta proporción en el 2007 se redujo a 4%, mientras que en Colombia para el mismo año casi llegamos al 28%. ¿Será que algo puede aprender Colombia de la estrategia tica para salir del hueco en el que estamos? ¿O será que le seguimos apostando a la guerra?
Tengo muchos amigos Ticos y me parecen “tuanis” (chéveres) por que se parecen mucho a nosotros los colombianos, con excepción de cómo pronuncian la “erre” y de que tienen un país que se esmeran en cuidar.
Que bueno sería que Colombia no tuviera que depender de su inteligencia militar sino civil. Más educación, menos ejército.


Entrevista Peter Diamond con La W

Que cortada tan brava...que se gane el Nobel de Economía no quiere decir que pueda resolver todos los problemas de la humanidad.

miércoles, 6 de octubre de 2010

¿Comprar o Desarrollar Tecnología?

Es un buen momento para que las empresas nacionales aprendan de sus pares extranjeras comprando nuevas tecnologías.

No es ningún misterio que en Colombia sean pocos los recursos que se destinan a Investigación y Desarrollo, tanto en lo público como en el sector privado, (Ver algunos datos). La inversión en Investigación y Desarrollo por parte de las empresas es escaza y existen razones para ello.

Una pregunta clave para la supervivencia de las firmas hoy es si las empresas deben invertir en investigación (I+D) o comprar tecnología. Actualmente sabemos que junto con la acumulación de capital físico y humano, uno de los elementos identificados como prioritarios en términos de crecimiento económico es la tecnología, los países y las empresas tienen dos caminos para tratar de aumentar su productividad: hacer inversiones en investigación y desarrollo (I+D) o comprar tecnología existente desarrollada por otros.

La respuesta se encuentra en la distancia del actual proceso productivo con respecto a la frontera delimitada por los más productivos. Si el nivel de productividad laboral de una empresa es muy distante de la productividad de sus pares internacionales, la mejor estrategia en este caso es invertir en tecnología ya desarrollada (Como la firma A en el gráfico) poniéndose al día con la tecnología. Por el contrario, para las firmas que se encuentran muy cerca, o en la frontera de la productividad en términos relativos con sus pares internacionales, la mejor estrategia debe ser la de invertir en Investigación y Desarrollo (I+D) moviendo la frontera misma de productividad y capturando mayor parte del mercado (Como la firma B en el gráfico).

Lo anterior implica que la baja inversión en I+D en Colombia es posiblemente un resultado de la distancia existente entre las empresas nacionales y sus pares internacionales en términos de productividad. En este sentido, las empresas nacionales tienen mayores incentivos para adquirir nuevas tecnologías y aprender de ellas, que desarrollar las propias.

Considerando la actual situación de revaluación del peso con respecto al dólar, la mejor estrategia que pueden utilizar ciertas empresas, especialmente las empresas orientadas a satisfacer el mercado interno, es usar esta oportunidad para adquirir maquinarias y equipos que las ayuden a aumentar su productividad y participación en el mercado.

viernes, 1 de octubre de 2010

Morir de Amor - Charles Aznavour y Compay Segundo

En 1999 Compay Segundo grabó el disco Calle Salud, producido por el sello GASA. En este disco, aparece una extraordinaria canción grabada junto a Charles Aznavour, artista denominado por el New York Times como el último cantor. La canción tiene como título Morir De Amor (Mourir D'aimer), la canción fue originalmente escrita en francés por Aznavour y traducida al español para este disco. Al ser entrevistado sobre el tema, Compay afirmó que haber cantado con el rey de la canción francesa “fue una experiencia extraordinaria”. (Leer Entrevista)